El voto a Paz-Lara expresa cansancio con el MAS y rechazo a la vieja política. Su apoyo proviene de sectores populares urbanos, su alianza fue improvisada y su programa es capitalista, con vacíos económicos. Ambos defienden la propiedad privada y son de fuerte orientación cristiana.
Brújula Digital|22|08|25|
Ricardo Zelaya
1. La gente que votó por ellos lo hizo porque está cansada del masismo, pero tampoco quiere volver a la vieja política neoliberal de Tuto y Samuel. Ninguna de las dos políticas pudo resolver los problemas del país, acabar con la corrupción y sacar de la pobreza a las mayorías siempre postergadas.
2. Los que votaron por ellos, en su mayoría, antes votaban por el MAS, pero eso no quiere decir que sean masistas: cambiaron de opción.
3. El voto masivo del PDC proviene sobre todo de los sectores populares de las grandes ciudades del occidente y, en menor medida del sector indígena o rural.
4. Ambos se unieron por suerte, más que por ideas: Samuel le robó a Rodrigo su primer candidato a vicepresidente (Sebastián Careaga), y éste tuvo que improvisar sobre la marcha a Lara como su nuevo acompañante.
5. El MAS en ningún momento pidió a sus votantes que voten por Paz y Lara. Evo apostó al voto nulo, y Andrónico y Del Castillo pelearon sus propios votos. Ninguno de los tres se imaginó que ganaría el PDC.
6. Debe haber uno que otro exmasista pasa-pasa en las filas del PDC, lo mismo que en las filas de Samuel, Manfred y quién sabe Tuto: así es nuestra politiquería corrupta, cada quién se acomoda dónde cree que le puede ir mejor.
7. La idea de que el MAS está detrás de Paz y Lara salió del tutismo, que usa videos y fotos antiguas, declaraciones aisladas y hasta inteligencia artificial para probar esta patraña.
8. Pese a que tiene muchos vacíos, su programa de gobierno no es socialista ni progresista: es claramente capitalista, con algunas promesas reformistas.
9. Paz y Lara carecen de un plan económico claro. No han explicado, por ejemplo, qué harán con la subvención a los hidrocarburos ni cómo harán que los dólares vuelvan a la economía. Tampoco con los territorios indígenas y los incendios que provocan los interculturales y agroempresarios.
10. Ambos defienden la propiedad privada y ninguno amenazó con confiscar nada. Los dos son ultracristianos y Lara incluso antiaborto.
Ricardo Zelaya es periodista.
