A través de redes sociales, el presidente Luis Arce denunció a la comunidad nacional e internacional la toma de tres unidades militares en el trópico cochabambino
Toma del Regimiento Cacique Maraza,. Foto: ABI
Brújula Digital|01|10|24|
A través de redes sociales, el presidente Luis Arce denunció a la comunidad nacional e internacional la toma de tres unidades militares en el trópico cochabambino, advirtió que estas acciones se constituyen en un delito de “traición a la patria”.
“La toma de una instalación militar por grupos irregulares en cualquier lugar del mundo es un delito de traición a la Patria, una afrenta a la Constitución Política del Estado, a las Fuerzas Armadas y al propio pueblo boliviano, que rechaza de manera contundente los bloqueos criminales de Evo Morales, así como estas acciones delincuenciales”, escribió Arce en redes sociales.
Esta mañana, grupos evistas tomaron el regimiento Cacique Maraza, mientras que se instalaron vigilias en el regimiento Epifanio Ríos y de la base naval de Puerto Villarroel, todas en el trópico de Cochabamba.
Este viernes se cumple el día 19 del bloqueo evista, que reclama la candidatura presidencial de Morales y que se anulen los procesos judiciales en contra del expresidente, uno de ellos por trata y tráfico de personas por haber tenido una hija con una menor de edad en 2016.
En ese sentido Arce indicó que denuncia ante el pueblo boliviano y la comunidad internacional que grupos armados afines a Evo Morales tomaron por asalto tres unidades militares en el trópico de Cochabamba, reteniendo como rehenes a militares y a sus familias, y amenazando sus vidas, siendo que ellos no intervienen en ningún operativo, solo están resguardando sus unidades. Ellos son de origen popular, y muchos también tienen raíces indígenas originarias, como los policías a quienes estos grupos irregulares están disparando con armas letales y lanzando dinamitas.
“Denunciamos que han tomado el lugar donde se encuentra el armamento militar en estas unidades, lo que se constituye en un acto criminal absolutamente condenable que dista mucho de cualquier legítima reivindicación social del movimiento indígena originario campesino”, acotó Arce.
Indicó que estas acciones estrangulan económicamente al pueblo boliviano, a trabajadoras y trabajadores, a naciones indígenas originarias campesinas, a productores pequeños, medianos y grandes, del campo y la ciudad, con lo que se busca la ruptura del orden público legalmente constituido y de nuestra democracia, con el único objetivo de acortar nuestro mandato, imponer una candidatura inconstitucional y lograr impunidad en procesos judiciales.
“Como gobierno democráticamente electo, en el marco de nuestras facultades constitucionales y con el apoyo del pueblo, continuaremos llevando adelante acciones orientadas a reestablecer el orden público precautelando la vida de las bolivianas y bolivianos, la paz social, así como el derecho del pueblo al libre tránsito, al trabajo, al acceso a combustible, alimentos y medicamentos”, añadió el Jefe del Estado.
BD/RED
@brjula.digital.bo