Víctimas de Senkata dicen que no apoyaron a Edgar Salazar en la toma de la APDHB

Brújula Digital |10|06|23|

La Asociación de Víctimas de la Masacre de Senkata negó que hayan apoyado a Edgar Salazar, dirigente afín al Movimiento Al Socialismo (MAS) en la toma violenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB) sucedida el pasado viernes.

“Resolvemos rechazar y repudiar la gran mentira de que nosotros estuvimos apoyando la toma de la casa de los Derechos Humanos. Prohibimos a las dos partes en conflicto, usar el nombre de la ‘Asociación de víctimas de la masacre de Senkata’ para justificarse ante la opinión pública. Su pleito o pelea interna, para nosotros no es de nuestro interés”, señala parte del voto resolutivo.

Según Salazar, que acompañó la toma de la institución de Derechos Humanos, dijo que las víctimas de Sacaba y Senkata apoyaron en tales acciones; además, en un comunicado dijo la defensa que realizan al interior de la Asamblea es “en pedido de justicia de las víctimas de Senkata”.

“Esta recuperación de nuestros ambientes es gracias al apoyo de organizaciones afines en la defensa de los derechos humanos, movimientos populares, familiares de las víctimas de Senkata y Sacaba, que indudablemente, ante el silencio en la ruptura del orden constitucional del 2019, han venido a recuperar estos ambientes”, manifestó Salazar en una conferencia de prensa.

Según un reporte de Página Siete, David Inca, el representante de las víctimas de Senkata, mostró su molestia por el uso que hizo Salazar por las afectados de Senkata. Dijo que no pueden utilizar “como bandera” a las víctimas.

“Nos parece mal que utilicen a las víctimas como bandera en sus problemas internos. Es un tema interno entre dos grupos de la señora (Amparo) Carvajal como del señor (Édgar) Salazar. Ninguno de los dos puede ni debe utilizar a las víctimas como bandera o de justificación de los actos que están haciendo”, declaró Inca.

Asimismo, en su comunicado, las Asociación de Víctimas de la Masacre de Senkata, advirtió que usarán “los instrumentos constitucionales” para hacer respetar el nombre y que no permitirán el uso político de las víctimas.

BD/MC