Ante polémica, ministro Ortiz afirma que Bolivia consume diariamente productos transgénicos

Brújula Digital |12|05|20|

El ministro de Desarrollo Productivo, Óscar Ortiz, defendió el estudio de los productos transgénicos en Bolivia y dijo en el país se consumen diariamente productos de estas características que son importados de países vecinos.

“El pan que consumimos todos los días se hace con trigo importado transgénico, todos los productos que vienen de países como Brasil, Argentina, y que consumimos todos los días, que les damos a nuestros hijos, que se venden en los colegios, son transgénicos”, afirmó el ministro este martes.

Un reciente decreto que autoriza estudiar la implementación de productos transgénicos en el país ha causado un importante debate entre quienes rechazan y apoyan la idea.

“Nosotros tenemos que decidir si Bolivia va a ser un país netamente importador de productos transgénicos o si en algunas regiones podrían aprovechar esta tecnología para producirlos”, aseveró el ministro.

Ortiz, según reporte de medios de comunicación locales, salió al paso a las críticas que recibió el decreto emitido por el gobierno de la presidenta Jeanine Añez, que autorizó la realización de procedimientos abreviados “para la evaluación del maíz, caña de azúcar, algodón, trigo y soya, genéticamente modificados en sus diferentes eventos, destinados al abastecimiento del consumo interno y comercialización externa”.

“Ya existen las normas legales vigentes sobre el uso de transgénicos y lo que se ha hecho es aprobar un decreto que establece que habrá procedimientos abreviados en la producción, pero eso no significa que ya se haya aprobado una modalidad de semilla transgénica específica, sino que se va a ir desarrollando en cumplimiento de todas las normas de seguridad que corresponden”, afirmó Ortiz.

Anunció que se reunirá en los siguientes días con representantes del sector agropecuario, “para definir directrices respecto a la siembra de este tipo de productos genéticamente mejorados”.

Finalmente indicó que el objetivo del decreto es regular la producción en algunas regiones sin vulnerar la Constitución Política del Estado y recordó que “el Estado Plurinacional ya cuenta con leyes referidas al uso de transgénicos”.

Anapo

Al respecto, el presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas (Anapo), Reinaldo Díaz, explicó que con excepción de la soya, en Bolivia está prohibida por ley la producción e importación de alimentos genéticamente modificados (transgénicos).

Agregó que, a pesar de las normas, “en los hechos, la población está expuesta al consumo de estos productos que ingresan al país a través de la importación o el contrabando”, situación que agregó, ha dejado a los grandes y pequeños productores de alimentos en una especie de estancamiento, pues deben enfrentar importantes pérdidas de sus productos a causa de las sequías o las heladas que se registran cada año”.

Díaz expresó que esas pérdidas, con el apoyo de la biotecnología, podrían enfrentarse de mejor manera.

Recordó que “recientemente salieron dos informes, uno de la Organización Mundial de la Salud y otro de la Academia de Ciencias de EEUU, que señalan que los cultivos genéticamente modificados y el herbicida glifosato no afectan a la salud”.

Bolivia Libre de Transgénicos

Al referirse al decreto, el representante de la organización ecologista Bolivia Libre de Transgénicos, Manuel Morales, afirmó que “lo que proponen es un acto de sedición alimentaria biotecnológica contra los mandatos de la Constitución Política del Estado que en su artículo 255 prohíbe la producción e importación de alimentos transgénicos”.

Si bien Morales es consciente de que en el país no se producen transgénicos, sí se los consume, y atribuyó esa situación al escaso control de las oficinas estatales, como el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag), la Aduana y la Oficina de la Defensa de los Derechos de los Consumidores.

Añadió que Bolivia Libre de Transgénicos “no apoya la idea del uso de biotecnología porque hay informes de la OMS, que advierten sobre el peligro del uso de herbicidas como el glifosato o los agroquímicos como el Monsanto, entre otros”.

BD/JI-PA