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Mundo | 21/04/2020

Califican a 2020 como “el peor año de la historia para el petróleo”

Califican a 2020 como “el peor año de la historia para el petróleo”

Washington DC |21|4|20|

Mario Cañipa Vargas, especial para Brújula Digital

Trágica jornada en el mundo del petróleo. La sobreoferta de unos cuatro millones de barriles diarios, la guerra de precios entre Arabia Saudita y Rusia, la extenuación de la capacidad de almacenamiento de los productores y los refinadores y la crisis que ha traído la pandemia del coronavirus apresuraron la caída del precio internacional del petróleo hasta un límite negativo del que no hay registro histórico en el mundo.

La semana pasada, cuando se informó oficialmente que las reservas de petróleo habían subido 19,25 millones de barriles, la Agencia Internacional de la Energía (AIE), calificó al 2020 como “el peor año de la historia para el petróleo” y advirtió que el exceso de oferta pondría a prueba la capacidad mundial de almacenar crudo, con el riesgo de que la saturación en algunos yacimientos obligue a parar la producción. Sus predicciones se cumplieron de manera dramática con el desplome producido el lunes.

Sin embargo, una proyección de lo que sucederá este año, tanto la OPEP como la AIE han mostrado un cauto optimismo para el segundo semestre, en tanto el impulso del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de reactivar la economía nacional con la vuelta al trabajo de millones de estadounidenses, que por ahora observan las medidas de aislamiento social, se concrete.

De acuerdo a esas proyecciones, las cotizaciones del barril de petróleo en noviembre podrían triplicarse a los valores promedio que han estado manejando antes de su desplome del lunes, que oscilaban en unos 20 dólares, e incluso algunos expertos han expresado su esperanza de que una vez que lo peor de la crisis del coronavirus haya pasado, la demanda de petróleo se incremente notablemente, con lo que su precio recupere las proyecciones iniciales.

Caídas de precios

Durante el primer trimestre del año, el precio del petróleo cayó un 66%. A principios de abril registró una continua baja que alcanzó al 100% y poco después llegó al 150%. Y luego se desplomó en poco más del 300% hasta cotizar el lunes en -37,63 dólares el barril, lo que significa, en pocas palabras, que quien lo produzca o lo tenga tiene que pagar ese precio a alguien para que se lo lleve.

“Esta es la consecuencia de varias cosas que han venido sucediendo, especialmente a partir del fin del acuerdo sobre cuotas de producción de los países productores de petróleo miembros y no miembros de la OPEP”, señaló Jonathan Johnson, un experto en temas de petróleo.

“Las diferencias entre Arabia Saudita, que es el principal productor de la OPEP y Rusia, que es el segundo productor de los países no miembros de la OPEP, desataron una guerra de precios y esa es una de las razones que en el fondo precipitó la caída de los precios en el mundo hasta llegar al precio negativo de hoy”, explicó.

En un intento de salida a lo que ya se veía venir como una crisis en los precios del petróleo, los dos países –recordó el experto– acabaron con su disputa hace algunas semanas al aceptar, junto a otros países productores, una reducción de casi 10 millones de barriles diarios para impulsar los mercados afectados por el coronavirus. Pero fue muy poco, y muy tarde.

“Aunque la OPEP ha aceptado una reducción sin precedentes de la producción, el mercado sigue inundado de petróleo”, añadió.

“Si el consumo de energía ha bajado un 30% y la OPEP reduce el suministro en un 10%, todavía hay una gran brecha”, dijo por su parte el jefe de estrategia macro del banco internacional Rabobank, Elwin de Groot, al explicar que sin vehículos en las calles ni aviones en los cielos las economías afectadas por la pandemia ya no necesitan las cantidades de petróleo y sus derivados proyectadas antes de la crisis.

Baja de la demanda

Con más de la mitad del mundo virtualmente paralizado a causa de las diferentes medidas de aislamiento social que se han impuesto en más de 150 países, la demanda de petróleo ha bajado notablemente.

En febrero pasado, la AIE, la OPEP y la Administración de Información de Energía de Estados Unidos proyectaban un aumento en la demanda mundial de petróleo de cerca de un millón de barriles por día para este año. Sin embargo, tras las medidas para combatir al coronavirus ahora se proyecta una caída en la demanda promedio anual que oscila entre cinco y nueve millones de barriles por día debido a la parálisis económica.

Pero hay otros factores adicionales que impulsaron esa caída en el precio, como la saturación de los tanques de almacenamiento tanto de crudo como de los derivados del mismo.

La baja en el consumo de los derivados del petróleo ha ocasionado también una baja en la producción de las refinerías, que han tenido que dejar de producir o buscar donde almacenar su producción anterior, ya que sus tanques de almacenamiento se encuentran cada vez más llenos.

De hecho, algunos expertos han explicado que encontrar tanques de almacenamiento disponibles en los lugares tradicionales en todo el mundo es una misión “prácticamente imposible” en este momento y adelantó que la capacidad de los mismos llegará al límite en un mes.



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