Biden cambia de tono y empieza a preocuparse más por los palestinos

Brújula Digital | Agencias | 27|10|23|

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su equipo han cambiado notablemente su tono en la crisis entre Israel y Hamás en los últimos días, pasando de un apoyo incondicional a Israel a enfatizar la necesidad de proteger a los civiles palestinos en Gaza antes de una inminente invasión terrestre israelí.

El rápido aumento en el número de víctimas palestinas, la dificultad de liberar a los rehenes en manos de Hamás y las crecientes protestas de naciones árabes, aliados europeos y algunos estadounidenses han llevado al equipo de Biden a respaldar una pausa humanitaria en los ataques israelíes y centrarse en la entrega de ayuda a los palestinos, según múltiples fuentes dentro y fuera de la administración, dijo la agencia Reuters.

Un funcionario de la Casa Blanca dijo que el cambio de tono se basó en “los hechos sobre el terreno” en Gaza, con una crisis humanitaria que empeora y las “conversaciones del equipo de Biden con muchos países”.

Ha habido una lucha detrás de bastidores entre Biden y sus asesores sobre el mensaje que debe dar Estados Unidos, según una fuente. “Hemos visto una evolución desde un apoyo incondicional a Israel a un enfoque un poco más matizado”, dijo un exfuncionario.

El Gobierno de EEUU no esperaba que las víctimas palestinas aumentaran tan rápidamente como lo han hecho, con más de 7.000 muertos en Gaza, según informan las autoridades locales, ni que la situación humanitaria empeorara tan rápidamente, dijo un funcionario estadounidense bajo condición de anonimato.

“Creo que el marco ha cambiado claramente, como era de esperar, en respuesta a las circunstancias cambiantes y lo que parece ser una catástrofe aún mayor que se avecina si los israelíes entran en Gaza con una campaña terrestre”, dijo Aaron David Miller, experto en Medio Oriente del Carnegie Endowment for International Peace, según Reuters.

Biden, de 80 años, ha cambiado de parecer ante las amenazas de sectores norteamericanos de no votar por él debido a su postura tan proisraelí Incluso el expresidente Barack Obama dijo que las acciones de Israel podrían tener un efecto negativo para la paz en Medio Oriente.

Funcionarios israelíes y sus partidarios en Estados Unidos han expresado en privado su preocupación a Reuters de que, a medida que pasa más tiempo desde las atrocidades del 7 de octubre cometidas por Hamás, el enfoque del mundo se va centrando cada vez más en la muerte y destrucción causada por el asalto israelí en Gaza.

Los asesores de Biden están instando a sus homólogos israelíes a analizar mejor cuál va a ser su estrategia de salida antes de iniciar la eventual invasión terrestre a Gaza.

Los funcionarios estadounidenses han advertido que sería un error que Israel elabore una estrategia “sobre la marcha”, tras invadir Gaza, ya que se cometerían las mismas faltas que cometió Estados Unidos tras la invasión a Irak.

Los asesores militares estadounidenses enviados a la región instan a sus pares israelíes a tener precaución ya que cualquier fuerza invasora enfrentaría un combate difícil y una red de túneles y edificios que podrían aumentar las bajas entre los soldados israelíes y los civiles de Gaza, agregó la agencia.

En declaraciones inusuales para un expresidente, Obama advirtió esta semana que la decisión de Israel de cortar el suministro de alimentos y agua a Gaza podría “endurecer las actitudes palestinas durante generaciones”.

Tras los ataques de Hamás a Israel, el 7 de octubre, Biden expresó un fuerte apoyo a Israel, diciendo que le había transmitido al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu que “su país tiene el derecho de defenderse y a su pueblo. Punto”. No mencionó al pueblo palestino.

También, antes de partir hacia Oriente Medio el 11 de octubre, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo que el principal objetivo de su viaje era mostrar solidaridad con Israel, incluyendo proporcionar todo el equipo militar que necesita para defenderse.

Pero durante el viaje de seis días de Blinken, el número de muertos en Gaza aumentó debido a los ataques aéreos israelíes y crecieron las preocupaciones sobre el alimento y el agua. Cada líder árabe al que se reunió Blinken en la región le instó a encontrar urgentemente una solución a la situación que se deterioraba rápidamente.

Las intensas protestas contra Israel que siguieron a la explosión de la semana pasada en un hospital palestino, que tanto Estados Unidos como Israel culparon a los militantes palestinos, también alarmaron a los funcionarios estadounidenses.

El cambio más evidente en la postura de Estados Unidos ocurrió esta semana cuando empezó a respaldar la cesación de los ataques israelíes en Gaza para permitir la entrada de ayuda y la salida de personas.

Cuando se le preguntó el 23 de octubre sobre las demandas internacionales de una pausa humanitaria, el portavoz de seguridad de la Casa Blanca, John Kirby, dijo que Estados Unidos deseaba asegurar que “Israel tenga las herramientas que necesita para defenderse y perseguir a Hamás, y que la asistencia humanitaria siga fluyendo”.

Un día después, Kirby y Blinken abogaron más enfáticamente por lograr esa pausa humanitaria.

Estados Unidos también revisó su propia resolución de la ONU, reiterando su enfoque en el derecho de Israel a defenderse, pero incluyendo a que se autorice una pausa humanitaria.

Biden fue más allá y dijo: “Israel debe hacer todo lo que esté a su alcance, por difícil que sea, para proteger a los civiles inocentes”.

También criticó a los “colonos extremistas” de Israel en Cisjordania, acusándolos de echar gasolina al fuego, y llamó a un “esfuerzo concentrado”, una vez que la crisis haya terminado para trabajar en un acuerdo en el que Israel y un nuevo Estado palestino coexistan en paz.

BD/RPU