En análisis del Cedib es preocupante la concentración de estas áreas en la Amazonía, zona no tradicional para la actividad petrolera.
Brújula
Digital|15|02|22|
El Gobierno promulgó el 10 de febrero el decreto supremo 4667 orientado a modificar la frontera hidrocarburífera a 108 las áreas reservadas a favor de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos para que desarrolle actividades de exploración y explotación, por sí misma, en asociación o a través de contratos de servicios petroleros.
“Esta modificación incluye la creación de nuevos bloques y la modificación de algunos existentes. Además de una preocupante concentración de estas áreas en la Amazonía, como una nueva frontera extractiva”, advierte el Centro de Documentación e Información Bolivia (Cedib).
El decreto supremo menciona la existencia de 108 áreas reservadas a favor de YPFB, que según las estimaciones del Cedib ocupan una superficie de 26.416.698 hectáreas, a la cual, sumando los contratos vigentes, la frontera petrolera asciende a más de 27 millones de hectáreas.
“Algunas de las áreas reservadas a YPFB, actualmente, ya son contratos vigentes y operativos. El decreto también evidencia que varias operadoras han resuelto contratos de servicios petroleros con el Estado y han procedido a devolver algunas áreas”, señala el Cedib.
Busca nuevas inversiones
Por su parte el ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina afirmó que el decreto Supremo 4667, busca dinamizar las operaciones petroleras en estas zonas y las oportunidades que permitan la captación de nuevas inversiones para el sector por parte de la estatal petrolera, sus filiales y empresas operadoras.
“Con esta norma, el número de áreas reservadas a favor de YPFB asciende a un total de 104, para que desarrolle distintas actividades de exploración y/o explotación tanto en áreas de interés hidrocarburífero en la zona tradicional y la zona no tradicional de nuestro país”, señaló.
En poco más de un año de gestión del presidente Luis Arce dijo que se logró nominar 10 nuevas áreas y redelimitar 16 áreas, mientras que en el periodo 2015-2017 solo se nominó una y en el periodo 2017-2020 esta labor fue inexistente.
“Sin lugar a duda, este decreto abre espacios para desarrollar más proyectos que nos permitan realizar mayores inversiones y generar un mayor número de actividades hidrocarburíferas en el upstream con la visión de impactar positivamente en los niveles de reservas y producción de hidrocarburos”, explicó Molina.
El titular de Hidrocarburos y Energías agregó que este decreto también aporta eficiencia a los tiempos de ejecución de actividades de exploración y explotación, puesto que antes del decreto 4667, un área quedaba calificada como área libre cuando concluía el plazo de un contrato para realizar exploración y/o explotación hidrocarburífera o la empresa definía no continuar el proyecto, perjudicando la continuidad de las operaciones petroleras en el país.
Sin embargo, a partir de esta norma, señaló que esas actividades podrán ser asumidas inmediatamente por la estatal petrolera.
Lo que dice el decreto
El decreto busca incrementar el número de áreas reservadas a favor de YPFB para que desarrolle actividades de exploración y explotación, dispone la previsión para que el Ministerio de Hidrocarburos y Energías establezca los lineamientos para la selección de empresas y suscripción de contratos de servicios petroleros.
También se pretende determinar el procedimiento para la reversión de áreas reservadas a favor de YPFB cuando opere por sí misma para establecer el procedimiento para reservar a favor de YPFB áreas en devolución con contratos de servicios petroleros donde existan campos, con el propósito de que YPFB de continuidad a las operaciones petroleras y a la producción del campo.
Se busca establecer el procedimiento para mantener en calidad de áreas reservadas a favor de YPFB, aquellas áreas con contratos de servicios petroleros en periodo de exploración con devolución total, con el propósito de que YPFB de continuidad a las operaciones petroleras.
BD JMC