Bolivia tiene el potencial de reescribir su historia económica, protegiendo su patrimonio natural y cultural mientras genera prosperidad para sus ciudadanos. ¡Es hora de actuar!
Brújula Digital|29|06|25|
Rolando Mendoza
La crisis económica actual ha reavivado un debate fundamental: ¿es posible que Bolivia deje atrás el extractivismo y construya un futuro basado en el turismo sostenible? La respuesta, respaldada por datos y la visión de expertos, es un rotundo sí.
La visita en 2023, a Costa Rica, una nación que con solo el 4% de la biodiversidad mundial, genera alrededor de 5 mil millones de dólares anuales a través del turismo sostenible nos sirvió como una poderosa inspiración. Su éxito radica en una clara apuesta por la sostenibilidad como modelo de negocio que ha trascendido fronteras. Si Costa Rica ha logrado tal hazaña, ¿qué podría conseguir Bolivia con su inmenso 40% de la biodiversidad global y la riqueza de sus culturas ancestrales vivas?
El potencial turístico de bolivia
La visión de una Bolivia próspera a través del turismo no es una utopía, sino una meta alcanzable, como lo ha demostrado la economista Andersen. En un momento de quiebre en el que Bolivia busca soluciones a sus desafíos económicos, la Mesa Ejecutiva de Turismo (La MET reúne a 16 organizaciones del sector privado y académico), recurrió a Andersen. Sus análisis no solo confirmaron la viabilidad del turismo como motor económico, sino que también proyectaron un futuro prometedor: la posibilidad de generar 3 mil millones de dólares y 300 mil empleos a partir de 2030, con una tendencia de crecimiento anual del 10%. Estas cifras han captado la atención de la sociedad boliviana, los tomadores de decisión y, significativamente, de una gran parte de los frentes y candidatos presidenciales para las próximas elecciones de agosto.
Pero, ¿quién es Lykke Andersen? Nacida en Dinamarca y boliviana de corazón, Andersen posee un PhD en Economía de la Universidad de Aarhus, Dinamarca, y cuenta con más de 30 años de experiencia en investigación sobre desarrollo y medioambiente en América Latina.
Actualmente, es la directora ejecutiva de la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible (SDSN Bolivia). Su trayectoria incluye la cofundación de INESAD, la Sociedad de Economistas de Bolivia (SEBOL) y la Revista Latinoamericana de Desarrollo Económico. Además es académica de número de la Academia Boliviana de Ciencias Económicas. Con más de 300 publicaciones, se encuentra entre el 5% de las economistas mujeres más citadas a nivel mundial. Un detalle a destacar: en 2002, la Cambridge University Press publicó el libro The Dynamics of Deforestation and Economic Growth in the Brazilian Amazon, coescrito por Andersen y su tutor de tesis doctoral, el doctor Clive Granger. El siguiente año, Granger fue galardonado con el Premio Nobel en Economía.
La triple hélice: clave para el éxito del turismo sostenible
El sector turístico boliviano está convencido de que la clave para transformar este potencial en realidad reside en la "triple hélice": la colaboración estratégica entre el sector privado, el sector público y la academia. La alianza ya forjada entre el sector turístico y la doctora Andersen ha sido invaluable para respaldar con datos concretos y, no meros relatos, la visión de un gran futuro para Bolivia. El eslabón que aún falta para completar esta poderosa unión es la participación activa y comprometida del sector público.
Su vasto conocimiento y rigor científico son el fundamento de las proyecciones que hoy ofrecen esperanza a Bolivia.
Hace 20 años James Scullion nos demostró que Bolivia atrae a los mejores turistas del mundo y hoy Andersen, con su estudio nos muestra a través de datos que un nuevo modelo de desarrollo económico es posible.
La protección de la naturaleza, la valorización de las culturas ancestrales y la generación de riqueza a través de un turismo responsable no son aspiraciones contradictorias, sino los pilares de un nuevo modelo integral. Es imperativo que los tomadores de decisión y los nuevos gobernantes que surjan de las próximas elecciones reconozcan el inmenso valor del turismo sostenible y se sumen a esta iniciativa. La experiencia y el respaldo científico de Andersen brindan una base sólida para que Bolivia no solo abandone su dependencia del extractivismo centenario, sino que también se posicione como un referente mundial en turismo sostenible.
Bolivia tiene el potencial de reescribir su historia económica, protegiendo su patrimonio natural y cultural mientras genera prosperidad para sus ciudadanos. ¡Es hora de actuar!
Rolando Mendoza es especialista en desarrollo y turismo.