Analistas critican preguntas del referéndum sobre combustibles por su ambigüedad y la posibilidad de subvención diferenciada

Brújula Digital | 21 de agosto de 2024

Analistas económicos expresaron sus preocupaciones sobre las dos preguntas del referéndum relacionadas con la subvención de combustibles, presentadas por el presidente Luis Arce el miércoles por la mañana. Según los expertos, estas preguntas podrían resultar ambiguas y permitir una subvención diferenciada para diferentes tipos de combustibles.

El exdirector del Banco Central de Bolivia, Gabriel Espinoza, advirtió que la separación de la consulta sobre la subvención del diésel y la gasolina especial podría llevar al país a adoptar un “esquema de subvención diferenciado, subvencionando quizás gasolina o diésel y dejando de subvencionar el otro combustible”.

El presidente Arce envió una carta al Tribunal Supremo Electoral (TSE) solicitando la evaluación técnica de las cuatro preguntas propuestas para el referéndum. Dos de estas preguntas se centran en la subvención de combustibles: una sobre el diésel y otra sobre la gasolina.

Espinoza destacó que, aunque la importación de diésel representa el 86% del total en comparación con el 56% de la gasolina, el problema asociado con la gasolina no es menor. “Aunque la reducción de la importación de cualquiera de estos combustibles podría aliviar el problema fiscal, este continuaría existiendo. Si bien el déficit fiscal baja, no se puede reducir a niveles manejables. El problema subsiste, y ninguna de estas dos preguntas en conjunto ofrece una solución integral al problema,” añadió en una entrevista con Brújula Digital.

Por su parte, el presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, calificó las preguntas planteadas como “ambiguas” y con una “trampa”. “Se está preguntando a la población en general si está de acuerdo o no con mantener la subvención a los carburantes, ‘tal como se encuentra actualmente’. Esto supone que la subvención puede reajustarse o modificarse, no necesariamente eliminarse completamente. No se está preguntando si se debe eliminar la subvención, sino si se debe mantenerla tal como está,” explicó Romero en una entrevista con Brújula Digital.

Romero también destacó que el gasto de 2.000 millones de dólares que realiza el Estado en la subvención de combustibles representa el 4% del Producto Interno Bruto y el 5% del Presupuesto General del Estado 2024, considerándolo “financieramente sostenible”. Señaló que si la economía estuviera en mejores condiciones, no se cuestionaría la subvención, y que el actual cuestionamiento se debe a problemas como la insolvencia y la falta de liquidez del Gobierno para adquirir carburantes.

Romero sugirió un “ajuste importante” para que la subvención llegue a los sectores económicos y productivos, se mantenga para el transporte público, y se elimine paulatinamente para empresas e industrias privadas que tienen la capacidad financiera para soportar el costo sin que esto afecte las arcas fiscales del país.

Sin embargo, también subrayó que lo “no sostenible” de la subvención son los daños colaterales, como el contrabando generado por los precios más bajos. “Como se menciona en la pregunta, ‘al tener un precio mucho más bajo que el internacional se genera contrabando’. Esto se debe a la falta de control efectivo en la venta del carburante,” añadió Romero.

Preguntas sobre la subvención

¿Está usted de acuerdo con mantener la subvención a la gasolina especial, tal como se encuentra actualmente, a pesar del alto costo económico que implica para las bolivianas y bolivianos, y el contrabando, daño económico al Estado, escasez de dólares y desabastecimiento de combustibles que genera?

Respuesta: Sí o No

¿Está usted de acuerdo con mantener la subvención al diésel, tal como se encuentra actualmente, a pesar del alto costo económico que implica para las bolivianas y bolivianos, y el contrabando, daño económico al Estado, escasez de dólares y desabastecimiento de combustibles que genera?

Respuesta: Sí o No

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