Mediante el evento, Anapo facilitó la generación de mayores conocimientos a todos los actores de la cadena productiva de la soya. Además, motivó el trabajo con enfoque hacia una producción sostenible.
Richard Paz, vicepresidente de Anapo Foto/Anapo
Brújula Digital |07|09|23|
"Debemos seguir impulsando la aprobación de nuevos 'eventos tecnológicos' (semillas transgénicas). En este congreso, hemos visto que la soya es una parte esencial de la cadena productiva de Bolivia y que la biotecnología puede convertirse en un pilar fundamental para mejorar la productividad, reducir los efectos del cambio climático y generar excedentes que aumenten los volúmenes de exportación", enfatizó Richard Paz, vicepresidente de Anapo, durante su discurso de cierre del V Congreso Internacional de la Soya que se realizó en Santa Cruz.
El representante de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) destacó la importancia del Congreso, en el contexto nacional actual. Asimismo, resaltó que existe una "comprensión creciente" entre los agricultores en torno a la implementación de "prácticas innovadoras" que pueden aumentar la eficiencia y la productividad "con un enfoque de contribución a la conservación de los suelos y la biodiversidad".
Durante dos días, 13 expertos de Estados Unidos, Paraguay, Brasil, Argentina y Bolivia, expusieron los últimos avances en investigación sobre manejo de suelos, fertilización, siembra, cosecha, manejo integrado de plagas y enfermedades, tecnologías de aplicación y optimización de la mecanización agrícola, el mejor manejo de los cultivos, mayores rendimientos y cuidado del medioambiente.
También destacaron lo que ellos consideran los valores de la biotecnología, como el producto transgénico HB4, factor que contribuye a mitigar las pérdidas por cambio climático, según dijeron. Se incluyeron también exposiciones de especialistas sobre perspectivas del mercado internacional y del clima.
Por ello, Paz, subrayó la relevancia de la biotecnología para el desarrollo del sector. “En países vecinos el uso de semillas genéticamente modificadas (transgénicos) ha aumentado la producción a partir de una mejora sustancial en la productividad, generando mayores excedentes para las exportaciones y, por consiguiente, de divisas”, acotó.
Para Anapo, el V Congreso Internacional de la Soya enriqueció la comprensión de las necesidades del sector y motivó a todos los involucrados a trabajar con determinación hacia un futuro con producción sostenible para Bolivia.
El éxito de este congreso derivó en la profundización del compromiso de los productores para mejorar la productividad, y aumentar la producción de soya en torno a la innovación tecnológica y la búsqueda de eficiencia continua que consolide el sistema productivo con un enfoque de manejo sustentable con el medio ambiente.
El uso de la biotecnología y transgénicos es un tema polémico debido a que existen sectores que consideran que las semillas alteradas pueden ocasionar la parición de nuevas alergias por introducción de nuevas proteínas en los alimentos, una resistencia a antibióticos en bacterias patógenas, la presencia de nuevas sustancias tóxicas en los alimentos.
BD/MC