La Paz, 25 de abril de 2024
Foto: Radio Fides
Brújula Digital|27|09|18|
El presidente Evo Morales concedió el jueves amnistía o perdón judicial en favor de los expresidentes Carlos Mesa y Jorge Quiroga para encarar la etapa post fallo de La Haya, una vez que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) emita el fallo sobre la demanda marítima el 1 de octubre.
“He tomado la decisión de que ningún expresidente, salvo acusaciones de delitos de lesa humanidad o genocidio, tengan proceso judiciales pendientes que entorpezcan las nuevas actividades internas y externas de defensa y negociación den nuestro derecho marítimo”, sostuvo el mandatario en conferencia de prensa.
La absolución jurídica rige en los procesos que involucran a los expresidentes en los casos Quiborax y Petrocontratos, con la condición de que “defiendan a Bolivia, al pueblo y al derecho a nuestra salida soberana al Océano Pacífico”.
Morales sustentó la medida en el artículo 172 de la Constitución Política del Estado y dejó en claro que el objetivo es garantizar la participación de esas personalidades, sin ningún tipo de obstáculo, en las futuras gestiones por la causa del mar.
“Tomo esta decisión de manera personal, apoyándome en la autoridad legal que la CPE me confiere y lo hago sin solicitar a los expresidentes beneficios para nada personal a cambio, solo que defiendan a Bolivia y a nuestro pueblo y nuestro derecho a una salida soberana al océano Pacífico con todas sus energías, con todo su corazón y capacidad intelectual”, dijo Morales.
Morales afirmó que “esta unidad ejemplar de los bolivianos debe reforzarse garantizando que todas las personalidades representativas que han acompañado al pueblo, en este gran proceso de unidad, y al Gobierno, y que deberán acompañar con mayores tareas en un futuro cercano, no tengan ningún tipo de obstáculo administrativo o político en sus futuras funciones”.
El 24 de abril de 2013, Bolivia sentó a Chile ante la CIJ en demanda del cumplimiento de los ofrecimientos hechos a lo largo de la historia de negociar una salida soberana al océano Pacífico, cualidad que le arrebató tras una invasión en 1879.